«El primer reto que ofrece el estudio del arte rococó consiste en su propia definición, dentro de una época incierta como es el siglo XVIII, donde se sucede, convive y solapa una pluralidad de lenguajes y soluciones artísticas. Además, toda categorización que trata de enjaular la realidad para explicarla tiene siempre un carácter relativo, al escaparse esta entre sus barrotes. Otra dificultad es el carácter un tanto caprichoso y lúdico de su comportamiento, que acaba por ocultarse ante los propios ojos del historiador del arte en su juego al escondite entre el contenido barroco y la forma clásica». Esta y otras cuestiones aborda la monografía de Fernando González Romero El arte rococó y su presencia en España, que acaba de ver la luz pública en nuestra colección Estudios históricos La Olmeda.